Orange Bow Tie

martes, 26 de marzo de 2024

El chico que me gusta está loco... ~Nueva historia ficticia~

Buen, día. O noche. O tarde. O lo que sea. Bienvenidx a mi blogsie💘 mi nombre es Cherocu y te presento mi más reciente historia. No me arresten es solo ficción 🥸 comencemos 🥰


Protagonista F: Azalea, 20 años, segundo año de universidad. Estudiante foránea que viene de un pueblo pequeño y vive sola en un apartamento.





Protagonista M: Jun, 21 años, segundo año de universidad. Vive en casa de sus padres pero nunca están y su familia es de mucho dinero.



~Intro~

Aranea wrote:

F. Dom (20) busca M. Sub entre 18 y 25 años para hacer RP de SM. Interesados manden al DM foto de cuerpo completo (con ropa), lista de kinks y ya veremos si nos agradamos. Solo personas serias.







"Listo" Pensó Azalea luego de hacer la publicación en un sitio web de citas. A sus veinte años, nunca había tenido un encuentro sexual con una persona que tuviese los mismos intereses que ella y ya estaba un poco aburrida de no poder cumplir todas las fantasías que se hacía en su cabeza, teniendo que conformarse con relaciones sexuales vainilla... si es que se le podía decir así, porque de plano no había pasado de los besos y un agarrón con algún muchacho en alguna fiesta universitaria. 

Su alias en redes sociales de índole SM era "Aranea" y ya era conocida en el ambiente por sus fotografías sexys y su hermoso cabello largo teñido (que al final solo era una peluca), haciendo sesiones tanto de sumisa como de dominante y vendiéndolas de vez en cuando. Aunque claro, sin mostrar su rostro. Toda esa fachada era para tratar de ser una persona totalmente diferente a la Azalea de la vida real, se esmeraba para vestirse diferente y no descubrieran su tímida e introvertida personalidad. Aquí ella era extrovertida, divertida, pero al mismo tiempo dura y cruel... mientras que en su día a día era pusilánime, nerviosa, estudiosa y callada. 

Pasado ya un tiempo de que hizo la publicación, sus DMs explotaron. Recibió invitaciones variadas de distintas personas, incluso mujeres queriendo ser su sub a como diera lugar.

No.
No.
No.
No.

Se dispuso a rechazar ofertas una tras otra. Ya era de esperarse que esto no era fácil. Azalea decidió dormir temprano.

Azalea llegó a su clase matutina como siempre, con algo de sueño y solo un café instantáneo en la panza. Al entrar al salón, se topó de frente con la luz de sus ojos, el amor de su vida, su alma gemela... O algo así era en su mente, aunque fuese solo un tipo cualquiera con el que compartía algunas clases. Esa persona era Jun, el muchacho carismático y popular de la facu, el cual siempre trae el porte de un modelo coreano: 1.79, honey skin, hombros anchos y cintura estrecha. Reloj caro en mano izquierda y todo eso.

"¡Oh! Hola Azalea" dijo Jun, con una sonrisa de oreja a oreja.

Azalea sonrió de vuelta... o algo así... (algunos creerían que era una mueca de asco o una mirada asesina... todo depende de la percepción) y con la misma se dispuso a encontrar asiento hasta el frente de la clase. Lo demás es historia, clase aquí, clase allá, lo de siempre. Las clases terminaron y se volvió para su casa.

Más notificaciones en su ordenador.

Rechazado.
Rechazado.
Rechazado.

¿Oh? 

Lo encontró. "Uf, cuerpazo. ¿Intereses? Los mismos que los míos. Debe ser una trampa" pensó para sí.

"Hola" escribió Azalea en el chat.

"Hola" respondió de vuelta el interesado.

"Me agradan tus fotos... Uh... Jules" le dijo ella.

"También me agradan las tuyas, Aranea" respondió él.

"¿Son reales?"

"Claro, todo lo que ves es mío. ¿Apoco me veo tan bien?"

"Algo, sí, normal..."

"Oh vamos, si por algo me contestaste el DM 😅"

"Mándame otra foto, para verificar que eres tú"

"Claro, tú sólo dime cómo quieres la foto"

"Quiero que te pon

"En seguida"


"Oh wow, sí que eres tú"

"Ahora ¿nos podemos conocer mejor? ¿De dónde eres? ¿A qué te dedicas?"

"Oye, son muchas preguntas cariño, una a la vez"

"Lo siento, me emocioné😅"

"Acerca de decir de dónde soy, prefiero no revelarlo ahora... y lo otro, soy estudiante de uni"

"Yo soy de X city y soy estudiante universitario en la X University"

"Wow, qué rápido dices tu info personal"

"No le temo a nada 😏 quiero conocerte ASAP... ¿vives cerca de X city?"

"He ido... de visita. Es lindo y tiene muchos lugares para ver" Mintió, en realidad vivía en la misma ciudad y, por si fuera poco, estudiaba en la misma universidad.

"No tanto, he viajado a lugares mejores... pero bueno, igual como es mi ciudad natal, le conozco hasta los recovecos más feos que tiene"

"Debe ser. Como turista te puedo decir que es mil veces mejor que mi pueblo rancio de 100 habitantes"

"Ohhh ¿provinciana?"

"Sip, sip. Un pueblo muy muy lejano y también muy muy pequeño"

"Deberías venir de nuevo"

"¿Debería? heh"

"Estoy seguro de que allá no encontrarás a nadie como yo entre esos 100 habitantes"

"Y menos si de los cuales 50 o 55 son mujeres 😿 oh y por supuesto 10 hombres ahí son de mi familia 😒"

"¡Calla! ¿Tan pequeño es?"

"Bueno, le exageré un poco, pero igual está bien feo"

"Ahora tengo curiosidad de saber dónde es..."

"Tal vez te diga, cuando entremos en más confianza. No vayas a venir a quererme secuestrar o algo"

"🤣🤣 Pero ¿y yo qué? Yo te dije de dónde soy, ¿me vas a venir a secuestrar?"

"Tal vez, después de todo necesito un sub 24/7 para que supla mis necesidades"

"Si a esas vamos, así sí quiero ¿Qué me harás una vez que esté secuestrado allí en tu sótano?"

"Pues nada, primero te obligaré a lavar mis platos y luego mi ropa porque tengo un montón acá que no se lava desde la semana pasada"

"Noooo no puede ser😫¡¡todo menos eso!! Si ni en mi casa lo hago 😭😭"

"Y al final me harás un sándwich"

"*se muere*"

"Oye, espera, todavía no te puedes morir, tenemos que hacer cosas de adultos después de eso"

"¿Cosas de adultos? ¿Como qué? ¿Leer el periódico, ver las noticias y hablar mal del gobierno?"

"No, no. Algo así como que te ate a una silla y te azote y te humille, más o menos"

"Cuéntame más..."

Azalea y Jules hablaron por un rato más, hasta que la noche les obligó a despedirse... no sin antes intercambiar números de teléfono.

Al día siguiente, Azalea se levantó temprano, con más energía que nunca y con ganas de seguir hablando con Jules. Incluso intercambiaron sus respectivos buenos días.

Ya en clase, Azalea se veía a sí misma esperando los mensajes de Jules como si su vida dependiera de ello. Además, era increíble la sinergia que tenían ambos, parecía casi como si se conociesen de toda la vida.

Así pasaron un par de semanas, mensajeándose e incluso mandándose fotos eróticas, audios e incluso videos... en los cuales claro, no mostraban sus caras, pero sí sus cuerpos desnudos y deseosos de encontrarse en persona.

~Capítulo 1~

"¿Será que deba decirle que en realidad vivo en la misma ciudad que él?" pensó ella una y otra vez. No... todavía no le diré nada.

"Necesito verte" le dijo él.

"No puedo, no estoy en condiciones de viajar"

"Al menos déjame ver tu rostro, necesito verlo e imaginarte completa en mis fantasías"

"No, esto no es parte de lo acordado"

"¿Me vas a venir a sacar eso otra vez? Ya no puedo más, siento que cada día te necesito más y no sé por qué. Todo de ti me gusta, me atrae, soy adicto a ti..."

Azalea sentía lo mismo, que no podía vivir sin él y que necesitaba conocerlo... pero también tenía miedo de que su fantasía se derrumbara al conocer a la persona detrás del usuario.

"Jules... lo siento. No es no"

"Ok"

Era su primera pelea... aunque de primera pasó a ser la última vez que hablaron, puesto que después de ello, Jules dejó de contestar los mensajes... es más, ya ni siquiera los recibía. Azalea supuso que la había bloqueado... su mundo se derrumbó. No podía sacar de su mente a Jules así como así, pero la vida le obligó a hacerlo, venían los exámenes finales y no tenía tiempo para pensar en tipos de internet.

Los exámenes finales pasaron y Azalea recibió un mensaje de texto. Era Jules.

"Aranea, siento mucho haberme ido así, de verdad... en estos días puse mis pensamientos en orden, fui con un psiquiatra e incluso me dio unas pastillas para dormir... todo por esta tonta obsesión. Pero no te preocupes, ya no te obligaré a nada y... es más, tengo que ser sincero contigo en algo. Sé que me vas a odiar por esto pero te lo tengo que decir para terminar ya de una vez con esto. Hay una chica en mi clase que me recuerda mucho a ti. Tiene tiempo que me gusta pero nunca he tenido el valor de hablarle... y es más, creo que me odia o algo aunque ni siquiera hemos platicado nunca ni nada... je je... pero bueno... yo... cuando no podía darte un rostro en mis fantasías, usaba el de ella. LO SÉ, ES DESAGRADABLE y me odio por ello, espero me odies así también después de esto... esa era mi obsesión con conocerte, quería finalmente olvidarme de ella y amarte plenamente a ti, pero al final solo soy un tonto egoísta que no puede hacer nada bien. No espero tu perdón... es más, ni siquiera sé si me querrás responder después de esto, pero solo quiero decir: Lo siento. Lo siento demasiado. Adiós Aranea."

Azalea se quedó impactada por el mensaje. Como predijo Jules, ella no tenía ni la más mínima intención de contestar, solo sentía asco... asco por sí misma, por él, por todo...

Los exámenes habían acabado, las calificaciones las habían dado y solo quedaba regresar a su pueblo hasta que el siguiente semestre comenzara. Azalea estaba agotada, tanto física como emocionalmente, como si un autobús le hubiese atropellado. Fue ahí cuando se encontró con Jun, sentado mirando al cielo. Para esto ya no había nadie en la universidad, las clases habían acabado. Azalea suspiró al mirarle, la luz del atardecer iluminaba la figura de aquél hombre majestuoso.

"Bueno, al menos tengo la dicha de apreciar algo tan bello el día de hoy. Es como un cuadro del renacimiento" pensó para sí, embobada.

A pesar de haberse enamorado tanto de alguien virtual, su amor platónico por Jun no se había desvanecido ni un poco. Vaya desgracia. Ni uno ni otro...

Jun se percató de la presencia de Azalea, la cual se puso nerviosa y miró hacia otro lado, como si no fuese obvio de qué estaba haciendo ahí babeando.

"Hola Azalea" dijo Jun.

"Hola Jun" dijo Azalea, nerviosa hasta la médula.

"Hoy te ves muy linda" le dijo "justo así, con la luz del atardecer iluminando tu bello rostro... vaya, como en una pintura"

Azalea no lo podía creer ¿acaso el famosísimo Jun le estaba haciendo un cumplido? es más ¿Y DIJO LO MISMO QUE ELLA PENSABA DE ÉL UN SEGUNDO ATRÁS?"

"¿Eh? Oh... gracias... supongo" respondió ella con incomodidad.

Jun rió.

"¿Acaso te desagrado tanto?" preguntó Jun, completamente serio.

"¿Qué?" Azalea estaba confundida, un segundo atrás todo se veía tan romántico y ahora que el sol se había ocultado, la atmósfera era lúgubre "¿A qué te refieres?"

"Sí, o sea, siempre te digo algo lindo y solo me miras como si hubieses pisado caca" atizó Jun, en un tono firme e intimidante, colocándose a la par de ella.

Ahora se encontraban frente a frente.

"No no no no no.... no. No es asi, por supuesto que no. Es todo un malentendido" respondió ella, nerviosa, dando pasos hacia atrás y sin poderle mirar al rostro.

"Y aún así estando frente a ti así y diciendo eso, tu lenguaje corporal me rechaza ¿Cuál es el malentendido entonces?"

"No es eso... es que... este... yo..."

"¡MÍRAME, MALDITA SEA, MÍRAME POR UNA VEZ!"

"T- tengo miedo" dijo Azalea al borde de las lágrimas, todo su cuerpo temblaba.

Jun le tomó por el cabello y la alzó para que le mirara a los ojos.

"Así está mejor"

Azalea estaba paralizada... ¿qué diablos estaba sucediendo? ¿esto era real...? ni siquiera se sentía como si estuviera en su propio cuerpo.

"¿Tan difícil es para ti al menos ser así de cordial conmigo?" le dijo, arrojándola a un lado. Ella se cayó de sentón.

Azalea todavía no lograba reincorporarse cuando Jun la jaló del brazo hacia su coche.

"¡Jun, me estás lastimando!" dijo ella, queriéndose soltar.

"Vas a venir conmigo sí o sí" dijo él, arrastrándola básicamente.

Azalea sentía que algo muy malo le iba a pasar, pero sus instintos de supervivencia que había practicado por años en las artes marciales mixtas se habían ido de vacaciones.

Jun por fin la soltó y abrió la puerta de su coche. Allí ella vio un bate de madera de baseball y fue cuando supo que tenía que correr... pero en cuanto ella se giró, Jun le golpeó con el bate y ella cayó al suelo desmayada.




.Cherocu.**

miércoles, 10 de enero de 2024

¿Dónde está Dana? CAPÍTULO VII ~Se terminó el día uno. Bienvenidos al día 2~

Enjoy~ i guess--


Como pude, me quité las esposas y abrí la puerta del baño lentamente, encontrándome con una figura conocida recargada en la pared frente al baño. Era, como de esperarse, el chico de los mandados: Jungkook.

"Tú... otra vez" dije yo, ocultando mi cuerpo desnudo detrás de la puerta.

"No es por gusto" aseguró, para luego arrojar una toalla hacia mí. La tomé y cerré la puerta de nuevo. Sequé mi cuerpo y después, ya con la toalla enredada en mi torso, volví a asomarme.

"Umm... ¿y la ropa?"

"Allá adentro" dijo, señalando la habitación donde me encontraba anteriormente.

"Hay una cámara en ese cuarto... no me puedo vestir ahí"

"¿Te parece que me importa?"

Supongo que tenía un buen punto. Salí del baño y caminé frente a él con frío y un poco de pena. En cuanto pasé por el marco de la puerta, ésta se cerró tras de mí. Escatimó cada segundo, heh. Sorprendentemente, el lugar esta completamente aseado, sin rastro de lo que había ocurrido antes ahí y, por si fuera poco, me encontré con una serie de artículos nuevos sobre una mesa: una cubeta metálica, una colchoneta, una almohada, sábanas dobladas, dos botellas de agua, cepillo y pasta de dientes, desodorante en spray, un cepillo de cabello, ropa y una pastilla acompañada de una nota: Es para dormir. Ahora la ropa interior era gris claro, y la ropa exterior parecía ser un pijama de pantalón y blusa de manga corta, ambos eran color azul claro. Tímidamente me vestí intentando que no se viera nada frente a la cámara, a lo cual era bobo porque estaba completamente rodeada de espejos. Me puse el desodorante, cepillé mi cabello y al final me lavé los dientes. Pensé muchas cosas en esos momentos de silencio. Un trato diferente tras otro, no parecía que fuese heterogéneo u organizado, incluso podría decir que todo era muy personal.

Al final, solo quedaba un paso por cumplir y culminar el día: tomarme la pastilla.

¿Debería hacerlo? ¿Por qué? ¿Me van a transportar a otro lugar? ¿De verdad creen que me la voy a tomar? 

... 

Y después de dar vueltas agotada en la colchoneta, pero sin poder dormir, terminé tomándola y durmiendo como un oso.

No sé cuántas horas dormí, pero me levanté al sonido de una alarma "¿Será mañana o será de tarde?" pensé para mí, y al momento, noté que frente a mí estaba Jungkook, sosteniendo un despertador. Mi vista y mi mente estaban todavía difusas, así que solo lo miré desconcertada. Jungkook apagó el despertador y lo lanzó un lado, produciendo un fuerte estruendo en el piso.